La Copa Ecuador 2025 dejó resultados que sorprendieron a todo el país. La eliminación de Macará Barcelona se convirtió en el hecho más llamativo de la jornada, especialmente porque fue obra de dos clubes de segunda categoría: LDU Portoviejo y Cuenca Jr.
Macará llegaba como favorito frente a Liga de Portoviejo, pero el equipo manabita mostró carácter y un fútbol efectivo. Con un plantel de bajo presupuesto, comparado con el del cuadro ambateño, logró neutralizar el ataque celeste y quedarse con una clasificación histórica. Para los hinchas portovejenses fue una fiesta, pues el club empieza a escribir una nueva página rumbo a la Serie B.
Lo ocurrido con Barcelona SC también estremeció al país. El ídolo del Ecuador, uno de los equipos con mayor presupuesto de la Serie A, fue eliminado por un aguerrido Cuenca Jr. El joven plantel azuayo jugó sin complejos, se defendió con orden y aprovechó sus oportunidades para sellar una de las victorias más resonantes de su corta historia.
Estas eliminaciones resaltan el verdadero espíritu de la Copa Ecuador: un torneo donde los pequeños pueden tumbar gigantes y demostrar que el fútbol se decide en la cancha. La eliminación de Macará Barcelona refleja la brecha económica existente entre equipos de Serie A y los de segunda categoría, pero también deja claro que la pasión y la disciplina pueden equilibrar las fuerzas.
Potencia del segunda categoría en el Ecuador
Tanto LDU Portoviejo como Cuenca Jr. inician en septiembre su camino en el Ascenso Nacional, con la mira puesta en alcanzar la Serie B. La confianza ganada tras eliminar a dos históricos del fútbol ecuatoriano será un impulso anímico para afrontar ese reto.
Para Macará y Barcelona SC, la caída representa un llamado de atención. Deberán replantear sus estrategias, recuperar confianza en la LigaPro y volver a conectar con sus hinchadas. La eliminación temprana deja un sabor amargo, pero también una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de no subestimar rivales.
El impacto mediático de estas sorpresas fortalece la Copa Ecuador. La presencia de equipos modestos que eliminan a los poderosos aumenta el interés del público y da relevancia a un torneo que se consolida como vitrina de nuevos talentos.
En conclusión, la eliminación de Macará Barcelona a manos de clubes de segunda categoría es un recordatorio de que en el fútbol nada está escrito. LDU Portoviejo y Cuenca Jr. celebran, mientras la Serie A asimila que los grandes también pueden caer.
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